REFLEXIONES SOBRE EDUCACIÓN por Ernesto

sábado, agosto 19, 2006

INTELIGENCIA EMOCIONAL


Los padres siempre queremos lo mejor para nuestros hijos. Nos preocupamos por elegir un buen colegio, que hagan los deberes, que estudien, que saquen buenas notas... Nos sentimos tranquilos cuando nos dicen en el colegio que son inteligentes y que no tendrán problemas en los estudios. Pero, suponiendo que pertenezcamos a este grupo de afortunados padres, ¿es eso todo? ¿podemos felicitarnos por la tremenda suerte que hemos tenido? Naturalmente la realidad puede no ser tan brillante. Nuestro hijo puede que pertenezca a un grupo de niños que no se relacionan bien con sus compañeros, que son inexpresivos, que no gestionan ni controlan sus emociones, que se enfadan en exceso si algo les sale mal, o que se muestran demasiado ufanos cuando les sale bien. Últimamente han surgido algunas voces, como la del profesor de psicología Daniel Goleman, que han puesto de manifiesto la importancia que tiene la inteligencia emocional en el comportamiento humano y en la consecución del éxito en la vida. Otro investigador, Salovey, de la Universidad de Yale, define la inteligencia emocional como "una parte de la inteligencia que concierne a la habilidad de comprender sentimientos propios y ajenos y de utilizarlos para nuestros pensamientos y acciones". Goleman trabaja en programas pilotos en colegios de Estados Unidos, donde se enseña a los niños a resolver conflictos, a controlar sus impulsos y a desarrollar sus habilidades sociales, porque está convencido de que el control emocional se puede aprender, y mejor desde pequeñitos. A partir de estos trabajos se ha comprobado que la situación de niños que eran rechazados ha mejorado. Por tanto, vemos que a los padres nos van saliendo nuevas tareas, no sólo debemos ayudar a nuestros hijos en el desarrollo de la inteligencia lógica, para que puedan obtener un buen futuro profesional, sino que también hay que educarlos emocionalmente, para que ese futuro sea realmente prometedor, e incluso, aunque su inteligencia lógica no sea demasiado brillante, puedan, con sus habilidades sociales y emocionales, conseguir una buena profesión. Se ha demostrado que chicos cuya inteligencia clásica (medible por un test) no era muy elevada consiguieron cargos importantes por poseer alta inteligencia emocional. Otros, en cambio, muy brillantes profesionalmente, por su baja inteligencia emocional, no eran felices debido a su incapacidad para relacionarse con otras personas y para gestionar su propia vida. Otra de las afirmaciones que realiza Goleman en su investigación sobre la inteligencia emocional es que si el aprendizaje del dominio de los impulsos no se ha realizado durante los primeros años del niño, éste tiene mayor dificultad de prestar atención en la escuela. Si las familias no realizamos la alfabetización emocional de nuestros hijos, se producirá una sobrecarga en las tareas de la escuela, que ya se encuentra superada con demasiados dramas no resueltos a nivel familiar y que llegan a las aulas. Hoy en día no es raro en una comunidad escolar ver algunos casos de chicos que no controlan sus emociones y que, cuando se les pide cuentas sobre pequeñas indisciplinas fácilmente corregibles, tienen respuestas muy exageradas, totalmente desproporcionadas y fuera de tono. Moderar los impulsos, resolver los conflictos de manera pacífica con el diálogo, interpretar correctamente los comportamientos de los demás, y muchas más cosas, que sirven para mejorar nuestra calidad de vida, se aprenden sobre todo en la familia, y los padres no debemos descuidar esta faceta, no menos importante que las notas académicas de nuestros hijos.
Elisa Aranda - Bióloga

1 Comments:

At 11:54 p. m., Blogger Emma Faura said...

Buenas Tardes, tengo un hijo de 7 años,y tiene mala conducta en la escuela, se enfada rapidamente, no se controla,cuando se molesta tira y rompe cosas.
Mi esposo y yo trabajamos hasta las 7:00pm, mi hijo lo trae y lo lleva la movilidad,y en las tardes sequeda con la empleada de la casa, como mi trabajo es flexible puedo llegar antes y ayudarlo con las tareas, siempre le hablo y le aconsejo, no le pego , pero si lo castigo privandole de las cosas que mas legustan como ver T.V, play station.

Quiero ayudarlo, derrepente necesita alguna terapia. Gracias por su respuesta.

 

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